Atrapado entre las redes del tiempo, sin salida, sin argumentos, vivo en una celda que se estrecha por momentos, acercando las paredes que encierran mi vida, impidiéndome la huida, dia a dia prolongando esta agonía. Vaya donde vaya mi celda me acompaña.
Empezó conteniendo un mundo, pensé que jamás me atraparía y ahora la recorro en un segundo, sus paredes tan lejanas no me dejaron estirarme esta mañana y ando agachado, mirando al suelo, casi sin ganas, es complicado, vivo encerrado y ya no puedo alzar la mirada.
|
No cabe nada, solo en mi celda no puedo andar, sus muros me hacen tropezar. Ya no puedo respirar, voy a estallar, no puedo más, me va apretando, me va encerrando, estoy llorando y mis lágrimas no caben en mi celda de cristal, me va a matar, tengo que empujar.
Grito, me levanto y mi celda en mil añicos sale volando. Me voy andando y a cada paso sus cristales se van clavando, pero sé que curarán y mi cuerpo dolorido vuelve a recordar cómo era estirarse y caminar sin tener frontera. |
Estrellas difusas > Poesia >