Yo he volado con e viento, yo he sentido el movimiento de sus brisas y huracanes, de sus risas y sus males recorriendo mi cuerpo, torturando mi espíritu.
Yo a un tablado he subido, ha invadido mi ser la furia de un cielo marchito. Prometí volar con él al infinito y vivir toda la vida como en un cuento, mas ya no pueden volar las alas que me dio el viento.
Prometió visitarme, prometió no olvidarme, y yo prometí esperarle.
Me regaló unas alas que daban miedo, que se derretían al tocar el mar, hechas de huracanes, hechas de fuego, y me enseñó a volar.
Yo he volado con el viento, yo he sentido su bramar, recorrido el mundo entero y vuelto a mi pesar.
Dijo que volvería, prometió que algún día el cielo de rojo se teñiría, que desde el sur me soplaría. Cada noche siento su falta, cada noche espero vuelva volando mientras veo el cielo sangre llorar. Mas las alas que me regaló el viento ya no pueden volar.
Yo he volado con el viento, yo he sentido su bramar, y ahora en tierra sólo quiero que me vuelva a hacer volar, que me vuelva a enamorar, mas las alas que me dio el viento ya no pueden volar. Ya no saben volar. Ya no pueden volar. |
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