¿Sabes dónde van los besos que no se dan? Se transforman en mariposas y echan a volar.
Dime, dónde los puedo guardar.
Porque cada vez que te veo mil mariposas emprenden el vuelo, y dejarlas marchar con toda esa pasión me parece un derroche, no tiene perdón.
Ven, acércate, no vayas a desaparecer, que te quiero aprender y descubrir cómo vivir una vida entera junto a ti. Quiero saber cómo atrapar mil mariposas en mis manos para poder regalártelas la próxima vez que nos veamos.
Y cómo… puedo atrapar un instante que se escurre entre mis dedos como el agua del mar. Ven y explícame cómo lo puedo detener Si quiero… atesorar Las miradas que se escapan sin quererlo, esas que dicen “te quiero” sin saberlo. Y dime… dónde encontrar todos esos momentos que quisimos compartir y no pudimos, tus abrazos, y todos los besos… que no nos dimos. |
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