Viene y va, huye y vuelve, no sé cuándo se irá, no sé cuando volverá. Silencioso se escapa siseando entre las sábanas sueños de humo, imposibles que se antojan a mi mente nítidos, consistentes.
Sale de mí, me siento morir vacía quieta en silencio dormida.
Vuelve en un instante cuando menos lo espero, me daña, me golpea, me hace sufrir, me hace llorar, despierta mis sentidos hasta ahora dormidos.
Y esta carcasa muerta, autómata de mente alerta e imaginación podrida, vuelve a rezumar vida.
Y vuelvo a ser yo quien habita este cuerpo, quien piensa en azul y siente en rojo, quien descubre un mundo en cada mirada y entiende una vida en una palabra. Vuelvo a ser yo. |
Estrellas difusas > Poesia >